Sobre la cosmética corporativa

Acabo de leer algunos artículos muy reveladores sobre la "cosmética corporativa" y sobre la actuación de empresas españolas en sus operaciones en el extranjero, en aquellos lugares donde rara vez llegan las cámaras y donde, aunque lleguen, "poco importan". Una se refiere a Unión Fenosa y la otra al BBVA.

Con respecto a Unión Fenosa las acusaciones tienen que ver con el impacto ambiental y con violaciones de derechos humanos en Colombia, Costa Rica, Guatemala y Nicaragua. Aquí la información completa.

Con respecto al BBVA la noticia se centra en su inversión en 11 centrales térmicas de carbón en EEUU, que emitirán unos 78 millones de toneladas de CO2 al año (algo así como sumar lo que emite Irlanda, Dinamarca, Suecia y Nueva Zelanda). Aquí la información completa.

Y para terminar extraigo unas elocuentes palabras de David Llistar i Bosch, del Observatorio de la Deuda en la Globalización:

>>La cosmética corporativa es crucial para el éxito de una empresa de proyección, especialmente en momentos de crisis. Tanto más cuanto más expuesta esté al consumidor y al pequeño accionista. Hemos visto últimamente que cuando empresas privadas grandes como el BBVA, el SCH, La Caixa, Endesa, Gas Natural o Repsol-YPF están en apuros, responden con intensas campañas de lavado y regeneración de imagen.
Si el problema es ser contaminante y contribuir al cambio climático, la respuesta es “Repsol patrocina el tiempo” (aunque luego lo cambie); si acaso el problema era ser demasiado ‘catalán’, se impone un enorme logo de La Caixa en las camisetas de la selección españolísima de fútbol; si el clavo estaba en el enriquecimiento ilegal de sus directivos, el SCH publica en su web los salarios (con olvido de dietas e incentivos).
Ahora bien, si hay una transnacional española campeona en cosmética corporativa es y ha sido el BBVA (...) <<
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